“Había una niña que se llamaba Aurora y que quería caminar. Llegó un ángel y le cumplió el sueño, pero para eso se tenía que llevar su silla de ruedas. Pasó mucho tiempo, la niña hacía lo que antes no podía hacer, pero después sintió que le faltaba algo. Volvió el ángel una noche y le preguntó si era feliz… ella le dijo que sí porque él había cumplido su sueño, pero que con la silla era más feliz, porque aunque no caminara, la silla lo hacía por ella”.Este es un cuento cuya autoría pertenece a Catalina Aranda, la niña símbolo de la Teletón 2008 que tiene un innegable talento literario que incluso este año la llevó a ganar el primer lugar en la categoría Infanto-Juvenil del III Concurso Metropolitano de Cuento y Poesía que organizó la Municipalidad de Las Condes.
“Mi amiga silla” se llama la obra en la que ella habla del vínculo que tiene con el medio que a diario le permite desplazarse, ante las dificultades que tiene de hacerlo sola, producto de la mielomeningocele que la afecta desde que nació. “Quiero caminar, pero me da pena dejar mi silla”, reconoce reflexiva y con evidente pesar en un honesto diálogo que también nos lleva por temas más alegres.
“Por mi personalidad, mi entusiasmo, mi cariño y mi alegría”, responde convencidísima Catalina cuando le pregunto porqué cree que fue elegida la niña símbolo de este año, algo que ella siempre buscó y que hoy la tiene más que orgullosa y feliz. Porque como ella misma lo comenta, esto le permite “representar a todos los niños discapacitados, estar en todos los eventos animando a los niños para que ayuden”, dice aludiendo a su intensa agenda de actividades que ha considerado, por ejemplo, varias visitas motivacionales a distintos colegios.
¿Cómo te recibe la gente?, le consulto a mi pequeña entrevistada. “Súper bien, con harto respeto y felicidad”, dice la niña que esta noche veremos en el ya tradicional número de “Ciclo danza” de Rodrigo Díaz, en el Teatro de calle Mario Kreutzberger.
En todo caso, este desafío y toda la exposición que enfrentará en pocas horas más el emblema de la cruzada solidaria, no logran inquietarla. De hecho, responde con un rotundo “No” cuando le pregunto si es que está nerviosa. Aunque reconoce que espera el momento con “hartas ansias, entusiasmo y felicidad”.
La chica de once años cuenta además que cuando fue designada como niña símbolo, la alegría entre sus amigos fue rebosante. “No lo podían creer”, dice antes de confesar que este desafío fue algo que buscó constantemente. “Yo siempre preguntaba ´¿por qué no puedo ser la niña símbolo?’ mis compañeros me decían que algún día iba a ser´”, relata.
Cata cuenta además que fue el propio Don Francisco quién la eligió. “Antes fui a una entrevista con él”, dice quien describe al líder de la campaña como una persona muy simpática que le agrada porque es “muy gracioso”.
Por último le pido a Catalina que haga un llamado a la gente para que esta noche colabore con la cruzada. “Que apoyen porque se cumplen 30 años, para que lleguemos a la meta y todos los niños de la Teletón sean más felices”.
Fuente; Terra
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